Nico G. Casares

Soy Nicolás González Casares, diputado al Parlamento Europeo por el PSOE, y pertenezco al Grupo de la Alianza Progresista de Socialistas y Demócratas (S&D).

He trabajado durante casi 20 años como Enfermero, fundamentalmente en el campo de la urgencia y la emergencia. En mi profesión he cultivado la docencia y la investigación.

Políticamente siempre he estado en mi partido, el PSOE, y he ocupado diferentes cargos orgánicos a nivel local y regional, además de haber concurrido en diferentes listas electorales a lo largo de 15 años. He sido Teniente de Alcalde de mi pueblo, Lalín, en el interior de Galicia, lugar por el que siento especial predilección, pues allí he vivido toda mi vida.

Más allá de la política, he participado en diversos movimientos sociales en el campo medioambiental, cultural y deportivo.

En mi tiempo libre me gusta disfrutar de la montaña, de los bosques y del mar de Galicia, así como de mi familia y amistades. También soy aficcionado a la lectura y a la música.

En 2019 inicié mi camino europeo, un gran reto. Como socialista y galleguista que soy siempre he sido un europeísta convencido. En tiempos difíciles para este gran proyecto aspiro a reforzarlo y difundirlo, porque en Europa siempre está la solución.

Europa ante un gran pacto verde

Uno de los mayores retos de Europa en este momento es avanzar en una transición ecológica que permita una descarbonización progresiva de nuestra economía, y luchar así contra el cambio climático. La UE y los países que lo forman están liderando en el mundo la transicción hacia un cambio de paradigma que destierre los combustibles fósiles. 

Esta gran transición también conlleva riesgos y decisiones delicadas. Debemos avanzar, sí, pero al mismo tiempo saber que hay que hacerlo de un modo socialmente sostenible, evitando desigualdades y facilitando nuevas oportunidades.

Mi papel en la Comisión ITRE está muy focalizado a estos aspectos. Conceptos como reducción de CO2, Transición Justa, Pacto Verde Europeo, Eneregías limpias… están en la labor diaria de mi equipo.

Europa y España antes los riesgos del populismo

Este es un continente con mucha historia. El siglo XX nos dejó claro que los nacionalismos destruían nuestras sociedades. En Europa y en España los fanatismos y populismo marcaron gran parte de la historia de los últimos 100 años. Sin duda lo mejor que le ha pasado a la gente que habita esta vieja parte del planeta es el nacimiento y consolidación del proyecto europeo.

La aprobación de la Constitución de 1978 y la entrada en 1986 en la Comunidad Económica Europea, hoy Unión Europea, son probablemente los hitos más importantes de los últimos 50 años de historia de España. Desde esos hitos históricos España alcanzó sus más altas cotas de bienestar y progreso. Desde el Parlamento Europeo tenemos la obligación de defender a nuestra sociedad europea para evitar que se asome a los abismos populistas y no caer en los destructivos errores del pasado.

Galicia con identidade nun mundo global

A entrada de Galicia na UE enfrontounos a retos importantes na súa modernización, con procesos dolorosos na nosa industria e no noso agro. Hoxe, sen embargo, non cabe dúbida de que temos grandes oportunidades no espazo común europeo.

Os retos do novo Pacto Verde Europeo terán moita incidencia na nosa terra; non é tempo de vitimismos, senón de atención e reacción para facer saber que estamos en Europa, para aproveitar as novas oportunidades.

Galicia ten un grandísimo potencial enerxético, nunca suficientemente valorado. Producimos enerxías limpas, que son as do futuro. A descarbonización tivo e terá un impacto alto nos nosos sectores produtivos, polo que é primordial loitar por incluírnos nunha Transición Xusta e aproveitar novas oportunidades industriais que están en camiño. Tamén na dixitalización.

O noso sector primario é clave para o desenvolvemento e fixación de poboación. O sector agrogandeiro ten que camiñar cara producións extensivas e máis sustentables. Na Pesca, o dominio galego dos mares ten que seguir marcando o noso avance polo camiño dunha sustentabilidade social, económica e medioambiental.

Pero se algo identifica a Galicia é o seu territorio e a súa lingua: o meu compromiso e a defensa da nosa terra, a nosa paisaxe, que é fonte de riqueza, e os nosos ecosistemas e valores naturais, van guiar o meu traballo en Europa. Seguiremos reivindicando o valor do galego, a nosa lingua, desde todas as instancias. Unha lingua viva que temos que defender.

.