El eurodiputado gallego Nicolás González Casares participó esta semana en una misión del Comité de Pesca del Parlamento Europeo a Thesalonika
El sector gallego y griego comparten los mismos desafíos en materia de cambio climático
El eurodiputado socialista Nicolás González Casares participó esta semana en una misión del Comité de Pesca del Parlamento Europeo a Thesalonika, concretamente al Golfo Termaico, enclave referente para el sector. Durante la visita, tuvo la oportunidad de reunirse con agentes clave del sector, pescadores, armadores y autoridades locales, como el alcalde de la ciudad, el socialista Stelios Angeloudis. Además, estuvo acompañado por el eurodiputado socialista de la región, el meteorólogo Sakis Anartouglou.
Durante la misión, se analizaron los retos a los que se enfrenta el sector pesquero griego, muchos de los cuales coinciden con el gallego. La acuicultura, centrada en especies como la lubina y la dorada, juega un papel estratégico en la economía local, mientras que la producción de bivalvos, especialmente los mejillones, tiene una fuerte conexión comercial con Galicia y Cataluña.
Este verano, la temperatura del agua superó los 30ºC, provocando una mortandad alarmante en los bivalvos y en las semillas. Esta situación, lejos de ser un episodio aislado, está convirtiéndose en un problema recurrente, que amenaza la sostenibilidad del sector. "El cambio climático está impactando directamente en la pesca y en la acuicultura, tanto en Galicia como en Grecia. El sector se enfrenta al aumento de las temperaturas, con el consecuente impacto en las especies que esto supone, y a la necesidad urgente de adaptarse a esta nueva realidad”, señaló González Casares.
Los representantes del sector en Thesalonika, al igual que en Galicia, reclaman un mayor apoyo de la Unión Europea para hacer frente a estos desafíos. Entre sus principales demandas están las ayudas para la adaptación al cambio climático y la modernización de las flotas para avanzar en la descarbonización.
La Política Pesquera Común debe integrar la dimensión medioambiental sin olvidar las necesidades sociales y económicas de los trabajadores del mar. En este sentido, el eurodiputado destacó que "la transición ecológica del sector pesquero es ineludible, pero debe hacerse con apoyo y acompañamiento para que los pescadores y mariscadores puedan adaptarse sin que su supervivencia económica se vea comprometida".
Los cambios que está sufriendo el mar exigen una respuesta basada en la ciencia y en la colaboración entre las partes implicadas. "Universidades, centros de investigación y profesionales del mar deben trabajar conjuntamente para encontrar soluciones que permitan mantener viva la actividad pesquera y marisquera", subrayó.
La misión en Thesalonika puso de manifiesto que los problemas que afectan al sector pesquero son compartidos en diferentes partes de Europa, por lo que la respuesta también debe ser colectiva.